sábado, 26 de diciembre de 2015

IX

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza

Parte IX:

En 1936 C.O. Wingate fue enviado a  Palestina como capitán de  inteligencia militar. Los palestinos liderados por el Gran Mufti  Al Husseini habían comenzado una violenta campaña de disturbios y ataques contra los funcionarios del Mandato Británico y las comunidades judías. Algunos ataques fueron muy sangrientos, especialmente contra los judíos de Jerusalén.

Charles Orde Wingate nació en la India Británica, el 26 de febrero de 1903. De una familia cristiana muy religiosa, Wingate se convirtió en un defensor fanático del sionismo, aprendió rápidamente hebreo y creía que su primer deber humano y moral era ayudar al Yishuv a crear por las armas su propio estado. Luego de estudiar el comportamiento de las bandas agresoras se dedicó a entrenar a los miembros jóvenes y más destacados de la Haganá, quienes lo llamaron  “hayedid” que en hebreo significa “el amigo”; Wingate adoptó con orgullo a “hayedid” como su nombre de batalla.

Wingate puso en marcha un plan para crear pequeñas unidades móviles de voluntarios de élite. Un informe que presentó el 5 de junio de 1938, se tituló “El secreto de apreciación de las posibilidades de la noche por las fuerzas armadas de los movimientos de la Corona, con el objetivo de poner fin al terrorismo en el norte de Palestina”, en su escrito detalló estos conceptos:

“Sólo hay una manera de enfrentar y detener esta situación intolerable, convencer a los bandidos y depredadores que nosotros ahora disponemos de todas las posibilidades de destruir el estilo de funcionamiento que caracteriza a las bandas. Las unidades de los SNS (Especial Night Scuadrons) llevarán la ofensiva al enemigo, quitándole la iniciativa y producirá en su mente la creencia que las fuerzas del gobierno conocedoras del terreno se moverán en la noche y los combatirá sin piedad en los caminos, en los pueblos, en el descampado y en sus propios refugios”.

Las operaciones de los SNS durante la noche le darían las ventajas del shock y la sorpresa. Su fuerza estaría basada en las comunidades judías (especialmente en los Kibutz y no en las bases británicas). El plan de Wingate fue aprobado por Archibald Wavell, entonces comandante de las fuerzas británicas en Palestina, y ganó el soporte de la Agencia Judía  En junio de 1938 creó el cuartel central en Ein Jarod, se establecieron bases adicionales  en Hanita, Geva y  Hashachar Ayelet,  para ampliar el entrenamiento de los Escuadrones Especiales Nocturnos (SNS).

La Agencia Judía los asistía y pagaba sus salarios, también pagaba los sobornos a colaboradores árabes de información y de inteligencia. Una de las tareas clave de los SNS fue proteger el oleoducto de Irak  a Haifa  de los saboteadores árabes. Los SNS también allanaron pueblos fronterizos utilizados como bases por el Mufti. Las acciones de “hayedid” y sus soldados tuvieron mucho éxito en la lucha contra la guerrilla, las incursiones terroristas y los ataques contra los judíos. Además los kibutzim en 1938 fueron dotados de una torre de guardia o vigía hecha de madera rodeada por una valla también de madera, para protegerse de los ataques palestinos. 

Las torres fueron dotadas con un reflector, un equipo generador de electricidad y algunas armas. El arquitecto Sir Charles Tegart diseñó los fuertes en 1937 sobre la base de sus experiencias contra la insurgencia india. Los fuertes de Tegart también eran construidos con hormigón armado, sistemas de agua y electricidad que les permitan resistir un asedio de varios días. Este tipo de fuertes correspondían a los kibutz importantes o ubicados en zonas estratégicas. Decenas de estructuras defensivas fueron construidas según el mismo plan básico, a lo largo del llamado "muro de Tegart" en la frontera norte con el Líbano y Siria, y en las intersecciones de caminos vitales en el interior de Palestina. Muchos de ellos todavía se pueden ver hoy en Israel  y se siguen utilizando como estaciones de policía y los más grandes son cárceles.   

La empalizada fue perfeccionada con algunos muros de cemento unidos por alambrados que podían ser electrificados. El sistema estaba basado en la construcción rápida de moldes de madera prefabricados, que se llenaban de grava o arena y el cercado se hacía con alambre de púasLas mejoras en la fabricación de la pared y la torre básica se atribuyen a Shlomo Gur, miembro del kibutz Tel Amal.  

Durante la campaña de construcción “Torre y empalizada”, (Joma U'Migdal, en hebreo) se fundaron 57 nuevos kibutzim, la construcción básica  se realizaba en forma rápida, generalmente en el curso de una sola noche, sobre un terreno que podía ser comprado o directamente ocupado. El fundamento jurídico para hacerlo era una ley otomana en vigor durante el período del Mandato, que establecía que ningún edificio ilegal puede ser demolido si el techo se ha completado.

 Estos asentamientos, (en su mayoría kibutzim y moshavim) algunos contaban con escuadrones especiales nocturnos, (dependían de su ubicación), las granjas agrícolas colectivas se transformaron en lugares fortificados y sirvieron para fines de seguridad  y para la creación de regiones habitadas con población permanente, que más tarde ayudaría a determinar las líneas que modificaron el Plan de Partición fijado por la ONU.

En octubre de 1938 Wingate viajó a Londres. Allí mantuvo una reunión privada con el Ministro de Colonias Malcolm MacDonald para manifestarle su oposición a las conclusiones de la Comisión de Lord Woodhead, que sostenía la conveniencia de postergar las propuestas anteriores sobre partición de Palestina en un  Estado judío y otro Estado árabe. Cuando la noticia de la reunión se conoció en los círculos militares de Palestina decidieron deshacerse de Wingate. 

Hayedid” afirmó públicamente:

 “Los judíos son los mejores soldados… Si hubiera más funcionarios y oficiales británicos que compartieran mis puntos de vista, la rebelión árabe habría terminado hace años”.

El comandante militar de Palestina lo destituyó del mando por criticar a camaradas del ejército e intervenir en asuntos políticos. En mayo de 1939, fue trasladado a Gran Bretaña. Su pasaporte fue sellado con una nota que le prohibía regresar a Palestina. Wingate también es famoso por la creación de los Chindits. Los Chindits eran fuerzas especiales de comandos  aerotransportados para operar tras las líneas enemigas de los japoneses en Birmania. Wingate utilizó el nombre de un león mítico birmano, el “chinthe”. 

Las pruebas recogidas en El Cairo en noviembre de 1944 eran irrefutables. Los asesinos Eliahou Bet-Zouri y Eliahou Al Hakim no intentaron negar su culpabilidad, habían sido capturados casi “in fraganti”, confesaron ser los autores de los asesinatos de Moyne y de su chofer y manifestaron los motivos que los impulsaron. En el Leji dijeron que el ataque también estaba destinado a demostrar la eficacia de la resistencia armada y demostrar que los británicos no estaban a salvo en ningún lugar, siempre y cuando insistieran en quedarse en Palestina. Varios analistas del Foreing Office suponían que el asesinato buscó tener impacto en los árabes, sobre todo para estimular el nacionalismo egipcio. También se conectaba la muerte de Moyne con el asesinato del ex primer ministro egipcio Ahmed Maher, un pro-británico. 

Sin embargo, a pesar de las pruebas, en plena Cámara de los Comunes Lord Strabolgi, miembro de la comisión de trabajo del Parlamento y presidente de la “Liga para promover una Palestina judía”, luego de la exposición de Eden manifestó sus sospechas que los asesinos podían ser partidarios de Hitler.
"Mi mente me dice que es probable que Lord Moyne fue asesinado por agentes nazis".

En aquella época, cada vez que se cometía un crimen escandaloso en Palestina o en el Oriente Próximo, y no eran pocos, los sionistas intentaban alejarse de su autoría, recordemos algunos ejemplos.

El asesinato de Haan.

La Haganá llevó a cabo el asesinato del poeta judío y activista anti sionista de origen holandés Jacob Israël de Haan, el crimen se realizó en Jerusalén el 30 de junio de 1924, el autor fue Avraham Tehomi, quien luego acabaría siendo expulsado de la Haganá porqué dijeron que Tehomi  habría actuado a título personal.

En realidad, la expulsión de Avraham Tehomi alias “Gideon”, uno de los hombres de acción más distinguido por los comandantes de la Haganá, se debió a que Jabotinsky lo había designado jefe de operaciones del grupo armado de ultraderecha Irgún o Etzel, nombramiento que él aceptó. Tiempo después volvió a las filas de la Haganá con la finalidad de cambiar su política desde adentro de la organización armada.

Este asesinato de los sionistas no pudo ser atribuido a agentes nazis, porque en 1923 Hitler estaba preso por el “Putsch de Múnich”, y recibió una condena de cinco años de prisión, aunque fue liberado nueve meses después del juicio, en 1924.

En una entrevista realizada por el periodista Shlomo Nakdimon en Hong Kong, en 1983, Tehomi admitió su participación, "Hice lo que la Haganá decidió que se debía hacer. Y nada fue hecho sin la orden de Yitzhak Ben Zvi. No me arrepiento, porque Haan quería destruir la idea del Sionismo".

La Haganá practicó durante años el apaleamiento, secuestro, muerte y desaparición de aquellos judíos no sionistas que comerciaban con palestinos o tenían actitudes de reiterada rebeldía a las normas dictadas por la Agencia Judía. Estos delitos nunca fueron reconocidos, y hasta en la actualidad son ocultados. 

El asesinato de Arlosoroff.

En la noche del 16 de junio de 1933, fue asesinado en la costa marítima de Tel Aviv  Haim Arlosoroff quién estaba paseando junto a su esposa,  cuando dos hombres jóvenes se le acercaron, uno sacó un revólver y le disparó de inmediato. 

Arlosoroff  era el Secretario Político de la Agencia Judía, un brillante economista y gran diplomático, muy amigo de Gurion y Weizmann. Gurion lo envió a Berlín para negociar con el gobierno nazi la posibilidad de aumentar la emigración de judíos y productos de infraestructura de Alemania a Palestina. Arlosoroff propuso a los alemanes la creación de un "banco de emigración" para que las fortunas de los judíos ricos se administraran de común acuerdo conforme los judíos alemanes llegaban a Palestina y los productos se vendieran, la propuesta después se llamó el “Acuerdo Havara”.

El día anterior al asesinato, un periódico del sionismo revisionista en Palestina había lanzado un duro ataque contra Arlosoroff, redactado por Abraham Stavsky  un seguidor de Jabotinsky.  “El pueblo judío siempre ha sabido cómo tratar a aquellos que han vendido el honor de su nación y su Tora, y hoy sabrá también cómo reaccionar ante este hecho vergonzoso.” La policía tuvo pocas dificultades para identificar a los asesinos, todos eran sionistas revisionistas. Stavsky fue acusado de instigador y los autores del crimen  fueron Aba Achimeir y Zvi Rosenblatt.

La defensa recurrió a tácticas desopilantes: Sostuvo que el  asesino era un delincuente árabe, que estaba encarcelado por otro homicidio, y había confesado que asesinó a Arlosoroff, porque quería violar a su mujer. Una falsedad absoluta.
También dijeron que el responsable de la muerte sería en realidad Joseph Goebbels, quién envió a sus agentes a matar a Arlosoroff porqué en su temprana juventud había sido novio de Magda Goebbels.

 Aba Achimeir era el más complicado, los investigadores entendían que era quién disparó el tiro fatal, mientras que Zvi Rosenblatt  sostenía una linterna, todos los acusados recuperaron con mayor o menor rapidez su libertad. El crimen quedó impune. A pesar de las evidencias, hasta el día de hoy los sionistas revisionistas niegan que hayan tenido algo que ver con este asesinato.

El atentado al SS Patria.

El “SS Patria”, era un buque de fabricación francesa de 11.885 toneladas, contratado varias veces por los sionistas revisionistas de Betar para trasladar judíos europeos que escapaban de los nazis. El SS Patria naufragó el 25 de noviembre de 1940 en el puerto de Haifa, matando a 267 personas e hiriendo a 172.  El barco se hundió en menos de 16 minutos a causa de una explosión supuestamente interna, atrapando a muchas personas en la bodega. El Patria era un barco mediano, relativamente moderno, adecuado para transportar personas  y que navegaba perfectamente bien, no se parecía en absoluto a los vetustos navíos que alquilaba la Haganá para trasladar ilegalmente a refugiados.                                             
En el momento del desastre, el SS Patria estaba llevando a 1.800 judíos que escaparon de la Europa ocupada por los nazis y las autoridades británicas los estaban deportando a la isla Mauricio porque la Agencia Judía no había solicitado los permisos de entrada, esta era una operación de sus rivales, los revisionistas. La Agencia Judía naturalmente se opuso a la deportación, trató de negociar el ingreso de los refugiados y demorar todo el tiempo posible antes que fueran deportados, con tal finalidad la Agencia había llamado a periodistas del Reino Unido y de EEUU para que documentaran y difundieran en sus medios la cruel insensibilidad de los británicos. Ante las presiones y la enorme cantidad de solicitudes enviadas desde todo el mundo las autoridades británicas permitieron a los supervivientes del Patria ingresar en Palestina exclusivamente  por motivos humanitarios. 

¿Quién fue el responsable? Parecía que nadie lo sabía, los ingleses sospecharon de una operación del Irgún porqué descartaban que lo hubiera hecho la Haganá. Sabían que el Leji no tenía comandos para operar en el agua. ¿Cuál era la verdadera razón del hundimiento, una explosión accidental, la introducción o colocación de una bomba? Nadie era capaz de dar una explicación cierta, los rumores y versiones que circulaban eran muchos.

Algunos acusaban directamente a los británicos, al Irgún, a la fatalidad, otros sostenían que los mismos deportados, presos de la desesperación, habían sido quienes hundieron al Patria, esta versión contó con el apoyo de Arthur Koestler, lo dice enPalestina 1917, Promesa y Cumplimiento” libro publicado en 1949. 
Otra versión que sólo se repetía en voz baja y ante amigos, decía que la decisión de poner una bomba en el barco había sido tomada por una facción extremista de la Haganá, vulnerando el procedimiento normal que se sigue en este tipo de operaciones. 

La potencia explosiva de la bomba fue mal calculada y causó daños en el Patria que no habían sido previstos, los autores sólo querían desactivar la nave para evitar que salga del puerto de Haifa. Decían, que esta infortunada acción causó graves discusiones internas en la Agencia Judía. Durante muchos años la verdadera causa de la tragedia del SS Patria quedó en el misterio y al poco tiempo nadie la recordaba, porqué los que sabían preferían que este hecho estuviera olvidado.

En 1957 un veterano luchador sionista llamado Munya Meir Mardor,  reconoció ser la persona que colocó la bomba en el casco del SS Patria y publicó un libro sobre su trayectoria como combatiente de la Haganá. Mardor lo hizo público en un libro editado en Israel, titulado “Shelihut Alumah: Pirkei Mivtsaim Meyuhadim Be-Maarkhot Ha-Haganah”, y fue citado en un folleto de la Comunidad Judía de Publicaciones, el Jews Weekly de San Francisco del 14 de diciembre de 2001. 

Munya Meir Mardor reafirmó su actuación en 1970 en un artículo  titulado  "La muerte en 1940 de 260 judíos por la explosión de un buque”. En este trabajo reitera que la acción fue ordenada por los mandos de la Haganá, ellos fueron los que entregaron  la bomba, él la adoso en el casco del Patria, en el lugar que le habían indicado y la activó. 

Ofer Dalia en 1990 confirmó la versión de Mardor en su libro “Escapar             del Holocausto: la inmigración ilegal a la Tierra de Israel, desde 1939 hasta 1944”. Oxford, Oxford University Press. p. 35. Rudolf Hirsch, un escritor alemán de origen judío que emigró a Palestina en 1939 y allí fue un estrecho colaborador de Arnold Zweig,  publicó una novela sobre este desastre, titulada “Patria-Israel” en la que se refiere con todo detalle a la participación de Mardor.
 Años después, Dominique Lapierre y Larry Collins en la página 295 del libro “Oh, Jerusalén” Plaza & Janes SA Editores, Colección Jet. dicen: “…en un gran hotel de Roma, los responsables de la Haganá decidieron hundir al navío in situ, (aclaración: se refieren al hundimiento del barco “Nino”). La dirección de la operación fue confiada a Munya Mardor, uno de los agentes más audaces de la organización judía”.

Para esta nueva operación, hundir mediante cargas explosivas a un barco de cabotaje, que llevaba diez mil fusiles y ocho millones de cartuchos para el Capitán árabe Abdul Aziz Kerin, la Haganá eligió a Munya M. Mardor, un especialista en acciones de este tipo, para comandar y realizar con tres buzos tácticos la misión. El sábado 10 de abril de 1948 a las 4 de la mañana, en el puerto de Bari, Mardor envió a doce metros por debajo de la superficie del agua italiana los fusiles y municiones del Capitán Kerin.

(Continuará)

lunes, 14 de diciembre de 2015

VIII

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza

Parte VIII:

Segundo crimen: Su negativa en 1944 a considerar seriamente la posibilidad de salvar a un millón de judíos a cambio de camiones y dinero, propuesta que los nazis habían ofrecido. Revisemos los hechos: El 19 de mayo de 1944 Joel Brand, uno de los dos máximos representantes de los sionistas húngaros, el otro era Israel Rudolf Kastner (Brand y Kastner dirigían el Comité de socorro y rescate de judíos húngaros) pasó por Turquía rumbo a Palestina llevando como equipaje una monstruosa propuesta consistente en canjear la vida de un millón de personas por diez mil camiones y algunos otros bienes, los que se utilizarían sólo en el frente oriental. El El interlocutor de Brand era Adolf Eichmann, la propuesta de canje estaba autorizada por el comandante en jefe de las SS Heinrich Himmler, los judíos serían entregados en tandas de 100.000 por cada 1.000 camiones.

Había transcurrido tan poco tiempo entre la invasión alemana de Hungría y la propuesta, que fue plausible pensar que había sido elaborada en Berlín con anterioridad y podía formar parte de un vasto plan nazi que podía perseguir varios objetivos: 

  a) Descolocar a Los Aliados, ahora estaban obligados a decidir si ellos querían salvar o abandonar a su suerte (la muerte) a un millón de judíos; 
  b) Provocar hechos que entorpecieran la marcha de una guerra que ya estaban perdiendo; 
  c) Reforzar el parque mecanizado de las fuerzas alemanas en lucha contra los soviéticos y 
  d) Complicar las difíciles relaciones con Stalin con sus aliados.


Desde el primer momento, Ben Gurion se manifestó como un decidido partidario de aceptar la propuesta de Eichmann. La Agencia Judía había negociado con las SS en reiteradas ocasiones desde que los nazis tomaron el poder en Alemania y Ben Gurion sabía que los nazis cumplían los acuerdos que celebraban con los sionistas, Eichmann había asegurado que el millón de judíos húngaros tenían como único destino a Palestina y eso era lo importante para Ben Gurion, la Agencia y los dirigentes de la Organización Sionista Mundial.

Ben Gurion envió a Moshé Sharett su segundo en la Agencia Judía a negociar en Berlín, e instruyó a Ira Hirschmann a hacer lo propio en los EEUU. Hirschmann, era un conocido ejecutivo de negocios que se había especializado en organizar la inmigración legal e ilegal de judíos  hacia Palestina, en 1949 publicó un polémico libro, sugestivamente titulado '' The Embers Still Burn “, criticando la política exterior de los Estados Unidos durante la guerra y post guerra. Al llegar a Palestina Brand fue detenido por los británicos y llevado a El Cairo, durante un encuentro con Lord Moyne, según algunos testigos le habría dicho: " Sr. Brand, ¿qué puedo hacer yo con un millón de judíos? ¿Dónde los voy a ubicar?”. 

Esta sería la participación directa de Lord Moyne en la operación “Blood for Money”, operación que justamente se llamó así porqué Lord Moyne fue quien sugirió a Churchill reemplazar los camiones por dinero.

Roosevelt instruyó a su embajador en Moscú a explorar la posible reacción de los soviéticos. El Gobierno británico dudaba en avanzar con esta iniciativa, sospechaba que la propuesta de los nazis no era más que un intento de debilitar la alianza con Stalin.  El gobierno de Roosevelt coincidió con Churchill cuando recibió a fines de julio un cable cifrado de Moscú con este lacónico mensaje: “Vyshinski considera inadmisible negociar con Hitler", Vyshinski era el Ministro de Relaciones Exteriores de la URSS.

Los hechos indican que Stalin dio un  portazo y los anglo-norteamericanos le pusieron cerradura a la puerta a pesar de los constantes pedidos de Ben Gurion y de los sionistas americanos e ingleses en iniciar sin perder tiempo alguno las negociaciones. A los tres meses de lanzada la propuesta, la operación “Blood for Money” fracasó. Ben Gurion, Moshé Sharett, Ira Hirschmann y Joel Brand quedaron con un sabor amargo en el alma, Stalin frustró la posible salvación de los judíos rehenes de Eichmann en Hungría. 

Es evidente, que no fue Lord Moyne el que decidió los hechos. Lord Moyne estaba muy bien informado, sabía por MacMichael, el Alto Comisionado en Palestina, quién oportunamente le había enumerado seis áreas de actividades subversivas emprendidas por la Agencia Judía contra el Gobierno Británico del Mandato, señalando que esta poderosa y eficaz organización equivalía, de hecho, a un gobierno que existía codo con codo con el Gobierno del Mandato. La Agencia Judía era responsable de:
  1. Mantener un ejército y un sistema de espionaje secretos;
  2. Realizar contrabando, robo y fabricación de armamentos;
  3. Organizar desde hace muchos años la inmigración ilegal;
  4. Practicar la violencia y la desobediencia civil;
  5. Facilitar y alentar la propaganda sediciosa y hostil en Palestina y en el extranjero, especialmente en los EEUU y Londres;
  6. Desconocer y vulnerar los derechos civiles de los ciudadanos judíos con imposición de penas al margen de las leyes.
Decía MacMichael, en resumen, “la Agencia Judía controlada por los sionistas ha socavado activamente la autoridad legal en Palestina, incluso actuaron y actúan para minar el apoyo hacia el gobierno del Mandato en Gran Bretaña, poniendo en peligro a las fuerzas armadas británicas cuando tratan de cumplir sus responsabilidades oficiales. También se ha demostrado la determinación ingrata de los dirigentes de la Agencia en atacar y desprestigiar a la misma nación que les dio muchos  medios para establecer una “patria” en Palestina”. 

(en MacMichael, Harold. “Memorandum on the Participation of the Jewish National Institutions in Palestine in Acts of Lawlessness and Violence” The Palestine Police, Jerusalem.)

Ver también: William A. Cook “The Rape of Palestine”, and The Plight of the Palestinians”. Los artículos de Cook se publican en Counterpunch, MWC News, Pacific Free Press, Atlantic Free Press, and Countercurrents.                                                                               
Más información : www.drwilliamacook.com.



Continúa. 

miércoles, 9 de diciembre de 2015

La Arabia Saudí de Al Rasheed. I.

Inicio mi colaboración con este blog con una reseña de libros que pienso no deben faltar en la biblioteca de todo estudioso del Medio Oriente. La actualidad del terrorismo musulmán es tan evidente que no necesita grandes explicaciones sobre sus actores; pero sus raíces y su relación con el Islam y los Estados Árabes sí necesita de conocimientos mayores. Dependerá de cada uno llegar hasta donde su interés y su curiosidad lo lleve, y yo, en este sentido, quiero aportar mi granito de arena.

Aclaro que la mayoría de los libros que comente estarán en idioma español, bien sea porque así fueron escritos (los menos, lamentablemente) o porque están traducidos. Algunos pueden no hallarse en las librerías actuales, pero seguro se encontrarán en las bibliotecas; así fue como los encontré. Trataré de seleccionar los que más me han llegado o me parecen claves para comprender éste o aquél fenómeno determinado. Si me equivoco, en todo caso, a nadie le hará mal enterarse un poco más de la profundamente endiablada situación en que se encuentran la mayoría de los países árabes y sus vecinos.
Empezaré por Arabia Saudí, uno de los lugares más estratégicos del mundo árabe y musulmán; quizá el más importante de todos.

* Madawi Al Rasheed. "Historia de Arabia Saudí". Cambridge. Madrid 2003 (2002).

Nota: el año entre paréntesis se refiere a la edición original. La edición española suele ser la primera, salvo indicación en contrario.
El hecho de llamarse "Saudí" es, en cierta forma, un accidente de la historia, ya que en esta zona había dos grandes familias que competían por el poder: los rashidíes y los saudíes. Además en la zona de los lugares santos y en el actual Yemen estaban, también los sharifs. La historia de Arabia Saudí (1) es la historia de como una familia, clan o casa, se impuso sobre las demás en un proceso que no fue menor a un siglo, y que contó con la intervención, ayuda, y preeminencia de una secta específica del mundo musulmán: el wahabismo.

Una historia desconocida en nuestro mundo y que explica lo que poca gente entiende: como un gran aliado de EEUU es también ideológicamente su gran enemigo.

(Continúa)

Carlos Mallah (se pronuncia /mal-laj/)

(1) recomiendo usar "Saudí" y no "Saudita", como a menudo suelo leer. De la segunda manera es como la llaman los franceses, y la nuestra tiene, además, la ventaja de parecerse más a su original en árabe. 

sábado, 5 de diciembre de 2015

VII

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza

Parte VII:

Isaac Shamir justificó la decisión de asesinar a Moyne por cometer los siguientes dos "crímenes" contra el pueblo judío:

Primer crimen. A principios de 1942, había presionado al Gobierno turco para rechazar el paso de un barco, el “Struma”, lleno de refugiados judíos provenientes de Rumania, la nave fue enviada de vuelta por el Mar Negro y esto significó la muerte de 800 judíos, un submarino lo torpedeó y el barco se hundió. 

Revisemos los hechos: La tragedia del Struma, parece ser un hecho casi olvidado por los países que intervinieron en la triste historia de este viejo barco botado en 1867 que navegaba hacia Palestina. Es posible que Shamir tuviera algunas confusiones, algo natural en una época tan compleja. La guerra estaba en su apogeo. Las tropas germanas avanzaban sobre el territorio soviético. En el Pacífico el Imperio Japonés asestaba duros golpes a los aliados. En el Norte de África las fuerzas del Eje se enfrentaban a los británicos.

Lord Moyne, acusado por Shamir, de presionar a los turcos para rechazar el paso de un ataúd flotante, en diciembre de 1941 y enero de 1942 no estaba en Palestina, se encontraba en Londres viviendo con su familia. Desde la designación de Churchill como Primer Ministro el 11 de mayo de 1940, Moyne ocupó varios cargos en el Ministerio de la guerra, en febrero de 1941 fue designado Ministro de Colonias y lideró las políticas del gobierno de Churchill en la Cámara de los Lores, con el título honorífico de líder de la Cámara de los Lores, sirviendo en esa posición algo más de un año. Es lógico pensar que Lord Moyne se ocupaba de asuntos más importantes y urgentes.

Sir Richard G. Casey, se trasladó a El Cairo en enero de 1942, cuando Winston Churchill lo nombró Ministro Residente en el Medio Oriente. En aquellos difíciles días el Barón Casey y el Mariscal Archivald Wavell fueron quienes seguramente tuvieron que ocuparse en tratar las dificultades que sufría el barco al que se refiere Shamir.

La dictadura de Antonescu permitió que miles de judíos con o sin papeles huyeran a través de los puertos rumanos hacia Turquía, con destino final Palestina, no sin antes desposeerlos de todos sus bienes. En el mismo día y noche que Japón bombardeó Pearl Harbor (6-7 diciembre de 1941), judíos provenientes de Bucovina, Moldavia y Besarabia, (según los registros eran 769 personas), tomaron un tren hacia Constanza en la estación Obor de Bucarest. El viaje lo había preparado la Haganá por medio del departamento clandestino Aliyá Bet, ese era el nombre en clave dado a la inmigración ilegal de judíos al Mandato británico de Palestina, en violación de las normas restrictivas a la inmigración, una práctica que se realizaba de manera constante desde los años 1920, Zeev “Jabo” Jabotinsky llamaba a la Aliyá Bet, el “deporte nacional”.

Los 769 pasajeros llegaron al gran puerto rumano del Mar Negro el 9 de diciembre, y sufrieron una gran decepción al ver el barco que debía llevarlos a Palestina, era una ruina flotante construida en Newcastle, Inglaterra, en 1867, se llamaba “Struma”, matriculado en Panamá y propiedad de la empresa griega Singros, tenía sólo un baño colectivo y carecía de cocina, en los últimos años había sido utilizado para transportar ganado.
                                                                                                                                   Luego de tres días de controles y verificaciones, el 12 de diciembre de 1941 los pasajeros pudieron embarcar en el Struma.  Todos ellos eran ciudadanos rumanos, formalmente enemigos de los Aliados pues, Estados Unidos e Inglaterra habían declarado la guerra a Rumanía.

El elevado precio del billete permitía suponer que los viajeros eran profesionales con estudios superiores y comerciantes de buen poder económico que viajaban con sus familias completas, con abuelos, niños e incluso algunos bebés. El 12 de diciembre, el Struma partió de Constanza y los pasajeros veían cómo la pesadilla de la persecución nazi se alejaba. El barco estaba al  mando del capitán búlgaro Garabetenko. 

El viaje hasta Estambul, que normalmente duraba 14 horas, se realizó en 4 días debido al mal estado de funcionamiento del motor, consiguió atracar en un puerto auxiliar en la capital de Turquía. El barco era pequeño para la cantidad de personas que transportaba, no todos los pasajeros podían estar en la cubierta, al mismo tiempo. 

Sólo 9 hombres pudieron desembarcar en Estambul, ellos eran los “comisarios políticos” de la Haganá. Los pasajeros comprobaron que habían sido estafados, 760 viajeros no tenían la documentación necesaria para desembarcar en Estambul ni visa para ingresar en Palestina, estas autorizaciones se les había asegurado que estaban incluidas en el exorbitante precio pagado por cada pasaje. 

Ningún pasajero desembarcó sin autorización, la única excepción que hicieron fue para una mujer a punto de dar a luz y que por el estrés vivido terminó abortando. Estos refugiados estaban intentando desde que embarcaron en el Struma, a pesar que ellos no lo sabían, ingresar de manera ilegal a "Palestina", La haganá sí lo sabía.

Los turcos fueron categóricos, ningún refugiado desembarcará en Estambul. Los ingleses eran inflexibles, los refugiados del Struma tenían prohibida la entrada en "Palestina". Los rumanos informaron que ese barco carecía de autorización para regresar a Rumania. Era evidente que la cadena de sobornos que compraba los permisos, se había roto esta vez.
                                                                                                                                  Las autoridades turcas declararon al Struma en cuarentena y se iniciaron conversaciones con británicos, suecos y soviéticos para obtener los visados. Las negociaciones se alargaron, las condiciones de vida en el barco fueron empeorando y sólo la ayuda enviada por judíos locales permitió comprar agua, comida y medicinas para los extenuados pasajeros. 

La difícil situación de los refugiados se extendió como un reguero de pólvora por todo el Oriente Próximo. Los británicos, temerosos de la reacción árabe ante la llegada masiva de hebreos, apoyándose en el Libro Blanco prohibieron a los pasajeros ingresar a Palestina por una serie de motivos: La empresa naviera no anunció el viaje y no se solicitaron los visados en los tiempos establecidos. Los pasajeros eran ciudadanos de un país enemigo.  Además, había informes que en el Struma se escondían algunos terroristas.

A fines de enero de 1941  el Ministro Residente en el Medio Oriente, el Barón Richard Casey recibió a los enviados de la Agencia Judía que le pedían que autorizara de manera excepcional los visados para los sufridos pasajeros del Struma, Casey accedió a permitir la entrada a Palestina de los niños embarcados que tuvieran edades entre los 10 y los 16 años. Ningún niño pudo bajar del barco, los turcos no lo permitieron.

La Haganá hacía muchos años que organizaba inmigraciones clandestinas, para eso habían creado la Aliyá Bet, (HaMossad le'Aliyá bet o Agencia para la Inmigración Paralela) que se dedicaba sistemáticamente a eludir las leyes inmigratorias británicas a través de bases en SuizaTurquía, Londres y hasta en la misma Alemania, en Hamburgo. La Haganá disponía de personal calificado y recursos suficientes para arreglar el motor dañado, navegar el Struma y esperar con prudencia y en silencio una oportunidad más adecuada para realizar el traslado de los refugiados. Los sionistas tenían mucha experiencia en operaciones de este tipo.

Durante varias semanas, la situación fue degradándose, muchos pasajeros amenazaban con escapar, por lo que la policía turca acordonó el barco en el muelle. El capitán y sus mecánicos no pudieron reparar el motor del Struma, porque no podían adquirir repuestos.

El gobierno turco el 23 de febrero de 1941 ordenó  remolcar al  viejo barco (tenía 70 años) fue conducido a seis millas (10 kilómetros) de la costa, en pleno Mar Negro y allí quedó a la deriva. Estos 760 hombres, mujeres y niños judíos,  comprendieron que sus ilusiones desaparecían en ese desconocido horizonte en el que los dejaron abandonados.

A las 9:30 horas de la mañana del día 24, el capitán del submarino soviético SC-213, Dimitri Mahelovich, sin tomar reparos, ordenó disparar un torpedo contra el barco y hundirlo. En pocos minutos mató a todos los pasajeros y a la tripulación. Sólo hubo un superviviente, el joven de 19 años llamado David Stoliar, quién pudo finalmente viajar a Palestina para luego radicarse en los EEUU. Es evidente, que Lord Moyne no fue quién causó los hechos que terminaron en esta tragedia.



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domingo, 29 de noviembre de 2015

VI

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza

Parte VI:

Winston Churchill comunicó a la Cámara que había recibido una carta del Dr. Weizmann, “un viejo amigo mío”, en la que informa que  el ejecutivo de la Agencia Judía ha pedido a su comunidad en Palestina, y cito sus palabras textuales: "trabajar sin descanso para echar fuera a los miembros de esta banda destructiva y prestar toda la ayuda necesaria  a la autoridades  para la erradicación de la organización terrorista."

Churchill conoció a Weizmann en 1915, cuando el prestigioso bioquímico era el director de los laboratorios del Almirantazgo. Allí descubrió el proceso ABE, que permitía obtener acetona, un disolvente cuya carencia amenazaba la producción de cordita  (explosivo utilizado por los cañones de la Armada Real), a través de la fermentación de la bacteria Clostridium acetobutylicum, conocida después en su homenaje como “organismo Weizmann

Churchill dijo la verdad, Weizmann era un viejo y leal amigo suyo y del Reino Unido. Pero, si durante muchos años los sionistas dependían de la buena voluntad de los británicos y atendían solícitamente sus solicitudes, la situación ya no era la misma en 1944 y el “viejo amigo” era muy respetado por todos, pero carecía de poder político real en el Ejecutivo de la Agencia Judía.

Quince días después del asesinato de Lord Moyne el Lehi fue puesto fuera de la ley por la Agencia Judía (recordemos que la banda de Stern o Leji y el Irgún o Etzell siempre fueron grupos armados clandestinos y nunca actuaron dentro de la ley, entendida como la legislación propia de la Agencia). 

La Haganá organizó la primera temporada de “caza”, conocida en Palestina como la “saison” (del francés "la saison de chasse”), que consistió en una persecución organizada contra los miembros del Irgun y Lehi para que cesaran sus actividades. Para la Agencia Judía ambos grupos armados eran políticamente lo mismo. 

En verdad, la Haganá realizó un esfuerzo concertado con los ingleses, para detener y entregar a los integrantes de las bandas rivales. Según Menachem Begin Jefe del Irgún, la Agencia y la Haganá denunciaron y/o capturaron a un gran número de luchadores. Fuentes británicas reconocieron que les entregaron aproximadamente 1500 terroristas.  Entre las víctimas de estos actos de entrega se encontraba parte de la comandancia del Irgún, principalmente Yaakov MeridorShlomo Lev Ami y Eliyahu Lankin. Los militantes del Irgún estaban dispuestos a tomar represalias contra sus ex compañeros de Haganá, esta actitud no prosperó: "No, no la guerra civil entre judíos", dijo Menachem Beguin. "Nuestra lucha no es a cualquier precio”.

El pequeño y hermético Lehi, a lo sumo tenía 700 integrantes que durante el día, la mayoría de ellos trabajaban como cualquier miembro del Yishuv y a la noche o cuando Lehi lo ordenaba se transformaban en guerrilleros, poseían un mayor grado de fanatismo y clandestinidad y soportaron mucho mejor la “caza”. La situación de Irgún era más complicada, su gente estaba uniformada y era conocida en el Yishuv, la mayoría de ellos había pertenecido a la Haganá. Estaban horrorizados ante el espectáculo de sus antiguos camaradas que estaban trabajando al servicio de la potencia ocupante entregando y hasta asesinando a patriotas judíos. Beguin ordenó efectuar un repliegue provisorio y esperar.

A fines de noviembre de 1944, lanzada la temporada de caza, Natan Friedman Yellin, alias "Yellin Mor" uno de los comandantes de Lehi, le dijo en la cara a Eliahu Golomb Jefe de la Haganá que Lehi “ejecutaría donde encontrara a la policía colaboracionista judía y a los delatores o informantes por ser todos ellos repugnantes traidores”. En consecuencia, Lehi actuaría en soledad durante la temporada de caza, y vaya si actuó duramente con los informantes judíos.

Antes de la temporada de caza, cuando los campos de batalla se alejaron de Egipto y del norte de África, pero, cuando Hitler todavía no había sido derrotado, la Haganá emprendió por primera vez, una campaña terrorista individual contra los británicos.

En 1943 ante las derrotas del Eje, Menachen Begin dio la orden de recomenzar las operaciones contra la administración británica y los palestinos, era el final del "armisticio" decretado oportunamente por Zeev Jabotinsky y David Raziel, ambos ya habían fallecido.

Haganá se limitaba exclusivamente en atentar contra los edificios y oficinas que controlaban la inmigración y al personal que tomaba decisiones, tratando de no causar víctimas inocentes. Siempre negaba su autoría en las acciones ante las autoridades británicas. Irgún y Lehi no tenían limitaciones, no aceptaban el control de la Agencia y sus decisiones eran autónomas (aunque no siempre fue así), realizaron continuos ataques contra británicos y palestinos.                          

La agresividad contra Gran Bretaña se debía en parte al creciente  apoyo norteamericano hacia ellos, en propaganda, movilizaciones, donaciones, armas y presiones al gobierno británico, pero sobre todo por la nueva relación de fuerzas entre sionistas y palestinos.

Durante más de tres decenios, bajo la protección y ayuda británica, el número, importancia económica, proyección internacional y la calidad en el entrenamiento militar de las organizaciones armadas judías habían aumentado considerablemente. 

Sobre este último aspecto debemos mencionar al legendario oficial del ejército británico Orde Wingate, un estratega militar poco común. Sus enseñanzas se concretaron en 1941 cuando La Agencia Judía creó el Palmaj, la fuerza de choque y asalto de la Haganá. Moshe Dayan, Yigal Alon, e Yitzhak Rabin entre muchos otros jefes militares se iniciaron en la Haganá, algunos a partir de los 14 años, todos fueron entrenados por Orde Wingate llamado el hayedid” (el amigo) por los soldados judíos que después pertenecieron al Palmaj bajo el comando de Yitzak Sadeh, alias “el Viejo”.

Especialmente durante la 2ª. Guerra Mundial varios miles de hombres y mujeres del Yishuv se integraron al ejército británico, a la RAF y a la Armada de Su Majestad, otros tantos formaron la Brigada Judía. La administración del Mandato cooperó con la Haganá (sin que los actores lo reconocieran), mediante la formación de: la Policía de los Asentamientos Judíos, las Fuerzas Auxiliares Judías, las Escuadras Nocturnas Especiales y los Notrim una especie de gendarmería urbana y rural de varios miles de hombres. Todos fueron entrenados y armados por los ingleses. Los Notrim tenían mandos británicos y eran una fuerza cuasi oficial.  

De todo esto carecía la totalidad de los palestinos, sus bandas tenían el liderazgo, la concepción de lucha anárquica y las armas que utilizaron en la 1ª. Guerra Mundial.

El entrenamiento militar y las experiencias en táctica y estrategia bélica obtenidas durante la Gran Rebelión y la Guerra Mundial fueron muy útiles en la denominada Guerra de independencia de Israel. Además tenían la formación y práctica brutal en la lucha de guerrillas del Irgún y el Lehi. 
Algo parecido ocurría con las cuotas de inmigración fijadas en los varios Libros Blancos emitidos por los británicos para calmar las protestas de los palestinos. Normas que poco se cumplían, los sionistas organizaban y realizaban inmigraciones ilegales de judíos permanentemente, ante la relativa pasividad e indulgencia de la autoridad colonial. Esto se interrumpía cuando la Agencia Judía utilizaba algún incidente o acción provocadora para realizar publicidad hostil contra el Reino Unido, o para contener fuertes reclamos de los nativos.

Algunos sionistas decían que Lord Moyne era un antisemita. Si, era tan antisemita como lo fueron Loyd George, Balfour, Churchill, MacMichael, Eden o Mac Millan, aunque todos ellos apoyaban a los sionistas en su proyecto palestino, porqué era conveniente para la estrategia imperial y los intereses de la Corona. Lord Moyne concentraba alguna antipatía de los sionistas debido a que en un debate en la Cámara de los Lores en 1942, comparó al sionismo con el nazismo, (los sionistas de Alemania apoyaban las leyes racistas de Núremberg) y los volvió a criticar cuando en Europa los judíos eran llevados a la muerte porqué los sionistas de la Agencia Judía no aceptaban la radicación de los judíos en otro lugar que no fuera Palestina.

Para el sionismo de la Agencia Judía los inmigrantes debían ir a Palestina, no en búsqueda de su salvación, debían ir para construir el futuro estado judío, por eso, debían ser jóvenes con estudios y si tenían dinero, mucho mejor,  podían utilizar el acuerdo Havara. El problema presentaba una contradicción muy simple, la gran mayoría de los judíos europeos perseguidos por los nazis no querían  ir a vivir a Palestina.

Dice Ilan Pappe en “Historia de la Palestina moderna, un territorio para dos pueblos” en las pp. 172 y 173. Edit. Akal.
Contrariamente a lo sostenido por su propaganda, los enviados sionistas tuvieron que hacer una gran labor de persuasión, rayando en la intimidación… para crear al menos  la impresión de que gran parte de los supervivientes del holocausto deseaban establecerse en Palestina. Finalmente sólo se radicó en Palestina el 10 por 100 de los tres millones de judíos que abandonaron Europa”.


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domingo, 22 de noviembre de 2015

V

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza

Parte V:

El 9 de noviembre de 1944 Churchill envió a Sir Anthony Eden, quién era su protegido. Eden se había casado en segundas nupcias con la sobrina de Churchill. Como Secretario del Foreign Office Eden brindó un informe sin mayores detalles sobre el crimen, señaló la tristeza que embargaba al Reino Unido, identificó a los autores del atentado, destacó que los judíos condenaban severamente este asesinato y comunicó que el rey Jorge VI y la reina Isabel enviaron sus condolencias a la Familia Guiness y al Parlamento. 

Gerold Frank en su libro “La Escritura”, Asesinato en el Cairo durante la Segunda Guerra Mundial, de la Edit.  Simon & Schuster, 1963, escribió:
La prensa hebrea sobreactuó el duelo, no podía encontrar palabras lo suficientemente fuertes para denunciar la acción terrorista”. 
Fue una "abominación... desde que se fundó el sionismo", se lamentó Haaretz, el periódico más influyente en la Palestina judía, "ningún golpe más grave ha recibido nuestra causa."

El Dr. Jaim Weizmann dijo que se sentía tan conmovido por este vil crimen que, “me ha impactado de tal manera que hasta hizo adormecer la tristeza causada por la muerte de mi propio hijo desaparecido en combate contra los alemanes”. Efectivamente, su hijo más joven, el Subteniente Michael Oser Weizmann, piloto del British Escuadrón N° 502 de la RAF, murió cuando su avión fue derribado sobre el Golfo de Vizcaya. 

La Agencia Telegráfica Judía de Jerusalén  en un cable publicado en Londres el 9 de noviembre de 1944, informó que: El Dr. Weizmann, presidente de la Agencia Judía, envío a la residencia del Primer Ministro Churchill una sentida carta expresando "Los crímenes políticos de esta naturaleza son una abominación que implica a comunidades judías enteras en el sentimiento de culpa provocado por unos pocos asesinos. Le puedo asegurar que el pueblo judío en Palestina y sus órganos representativos han decidido hasta el límite máximo de su poder cortar desde la raíz y hasta las ramas, este mal que ha nacido en nuestro medio”.  

Tanto en “Churchill por sí mismo”, World Politics, página 442, como en Sir Martin Gilbert, Winston S. Churchill”, vol. VII, nos informan que el 17 de noviembre 1944 el Primer Ministro en la Cámara de los Comunes expresó con inocultable dureza:

"Este es un crimen vergonzoso que ha conmocionado al mundo, si nuestros sueños en pro del sionismo han de terminar en el humo de las pistolas de los asesinos, y nuestro trabajo para su futuro será producir un nuevo conjunto de gánsteres dignos de la Alemania nazi, muchos como yo, tendrán que reconsiderar la posición que hemos mantenido de manera consistente en el pasado. Si ha de haber alguna esperanza de un futuro pacífico y exitoso para el sionismo estas actividades malvadas deben cesar y sus responsables deben ser destruidos”.

Los británicos sabían que en el Ejecutivo de la Agencia Judía, en la Haganá y en el Yishuv se produjeron varias divisiones, recordemos que Yishuv es la palabra hebrea que se utiliza para referirse a la masa de colonos y pobladores judíos residentes en la Palestina otomana y posteriormente durante el Mandato Británico. El término completo es Hayishuv Hayehudi b'Eretz Yisrael. 

En la Agencia Judía había una facción partidaria de acciones violentas contra los británicos y se oponían a la tradicional posición moderada, paciente y probritánica de Weizmann.

En 1939 el lobby sionista de Londres había informado a las autoridades del Yishuv que la postura del gobierno británico no era favorable al proyecto judío, el Reino Unido intentaba compensar a los palestinos por la sangrienta represión efectuada por los británicos y la Haganá durante la Gran Rebelión de 1936-1939 que causó a los palestinos 5.000 muertos, 14.000 heridos, decenas de aldeas demolidas y sus dirigentes ejecutados  o exiliados.

En Downing Street fueron consideradas como muy inquietantes por su significado las siguientes palabras de Ben Gurion pronunciadas en 1939, antes de la difusión del Libro Blanco: 

"Nuestra mayor preocupación era la suerte que estaría reservada a Palestina después de la guerra. Ya estaba claro que los ingleses no conservarían su Mandato. Si se tenían todas las razones para creer que Hitler sería vencido, era evidente que la Gran Bretaña, incluso victoriosa, saldría muy debilitada del conflicto. Por eso, yo no tenía dudas que el centro de gravedad de nuestras fuerzas debería pasar del Reino Unido a América del Norte, que estaba en vías de asumir el primer lugar en el mundo".

En una entrega anterior nos habíamos referido a H. J. Temple, el vizconde de Palmerston, con cincuenta años de funcionario en distintos gobiernos del Reino Unido durante el siglo XIX. Palmerston se caracterizó por establecer alianzas con Francia, Rusia, y el Sultán otomano seguidas de rupturas con sus ex aliados para después de algún tiempo volver a amigarse y enfrentarse. Para justificarse ante el Parlamento brindó esta notable y franca confesión: “Señores, el Reino Unido no tiene amigos permanentes ni enemigos permanentes, sólo tiene intereses permanentes”.

Casi un siglo después, Ben Gurion demostró que era un gran discípulo de aquel Primer Ministro británico.

En el gobierno del Imperio y especialmente en la comisión de Relaciones Exteriores no tenían dudas que el “Libro Blanco de McDonald de 1939” a pesar de las justificaciones y explicaciones dadas a los sionistas fue asumido como una inmerecida puñalada. 

Neville Chamberlain había causado una fractura con la Agencia Judía, para el Foreing Office el libro Blanco se hizo por qué fue lo que debía hacerse, tratar que Palestina se mantenga lo más lejos y ajena posible a la guerra. (El verdadero problema era cuidar que los árabes no se plegaran a Alemania e Italia).

"En septiembre de 1940, los italianos bombardearon desde el aire el centro de Tel Aviv, causando más de cien víctimas... Cuando el ejército alemán invadió Europa y el Norte de África era probable que también conquistaran Palestina. En el verano de 1940 y en la primavera de 1941,… el peligro parecía inminente. El pánico cundió en el Yishuv,... Mucha gente trató de encontrar una forma de salir del país, no era fácil, algunos lo lograron... Muchos no se arriesgaban y portaban cápsulas de cianuro." Del historiador israelí Tom Segev en "El séptimo millón." (The Seventh Million: The Israelis and the Holocaust / Tom Segev ; translated by Haim Watzman, New York : Henry Holt, 2000.)

Ben Gurion le dio a Churchill una respuesta aparentemente clara y firme, pero que en el fondo era equívoca,  permitía realizar varias interpretaciones: “Lucharemos contra Alemania como si no hubiera Libro Blanco y lucharemos contra el Libro Blanco como si no hubiera guerra”.

Durante los años de guerra la mayoría de los dirigentes sionistas decidieron centrar sus esfuerzos en seducir a los judíos de EEUU.  Una parte considerable de ellos estaban más cerca de las posiciones revisionistas de Zeev Jabotinsky (Jabo) porqué suponían que la Agencia Judía y la Histradut, la Federación Obrera creada en 1925, estaban dominadas por el Partido Laborista y respondían a ideologías socialistas. Parece que los judíos de EEUU no sabían que Ben Gurion y Weizmann cuando se referían a Jabotinsky lo llamaban el “Hitler judío”.



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miércoles, 18 de noviembre de 2015

IV

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza

Parte IV:

Media hora después de dejar las oficinas de los Pilares Grises en Garden City, Lord Moyne y sus acompañantes  llegaron al   N° 6 de Hassan Sabry Street a las 13,05 pm aproximadamente. Lance Corporal Fuller apagó el motor, se bajó y abrió la puerta para que el ministro descendiera.

En ese momento dos jóvenes saltaron desde los arbustos en los que se habían escondido, rápidamente sacaron sus revólveres y sin pronunciar palabra alguna dispararon a muy corta distancia, el chofer Fuller murió en el acto y Lord Moyne se desplomó sobre el cesped, estaba gravemente herido, con tres balas en su cuerpo. Fríamente, los dos asesinos treparon en sus bicicletas y pedalearon a toda velocidad a lo largo de la calle, necesitaban cruzar parte de la ciudad y llegar a una casa “aguantadero” donde serían protegidos y se les facilitaría el regreso a Palestina. 

Fue evidente que en el desayuno de esa mañana Lord Moyne había ordenado a los guardias de la casa que quedaban fuera de servicio para todo el día.

Sólo unos minutos después del tiroteo, el Mayor Samson llegó a la escena del crimen, su aparición fue causada por una llamada de la Policía Militar segundos después que Lord Moyne los había despedido. Suponiendo que también habría liberado a sus guardias de la Villa, quiso alcanzar al automóvil del Ministro con la intención de brindarle su escolta personal. Sansom fue informado por un policía que los asesinos eran dos hombres jóvenes con camisas de color caqui y que se desplazaban en bicicletas. Otro hombre de la policía, el cabo Amin Abdullah, inspector de la guardia egipcia había llegado en motocicleta y se sumó a la caza de los asesinos. 

En el puente Boulac que cruza el Nilo estaba abarrotado a esa hora pico, Abdullah vio a los dos ciclistas, se acercó a ellos con su moto y a toda velocidad  atropelló a  la bicicleta más cercana, lanzando al ciclista al suelo; se produjo un tiroteo sin consecuencias. Samson acelerando al máximo su automóvil llegó al puente, alcanzó y redujo al otro ciclista asesino.  

En el hospital, Lord Moyne recibió una transfusión de sangre, y una bala fue sacada de su estómago, el Rey Faruk fue a visitarlo esa tarde,  los médicos le informaron que había pocas esperanzas para el ministro. Casi seis horas después de los tres disparos que lo impactaron Lord Moyne murió.

Mientras tanto, en la sede de la policía de El Cairo, los detectives fueron descubriendo algunos datos sobre sus cautivos. Sus nombres reales eran Eliahu Hakim y Eliahu Ben Tsuri, se dudaba si Hakim tenía 20 o 17 años. "¿Por qué se habían convertido en asesinos?"  Les preguntaron. Respondieron "Porque Lord Moyne representaba la política anti-judía de la nación británica.

La recepción en Londres de los cables que informaron del asesinato de Lord Moyne causó un enorme impacto, una mezcla de estupor e indignación. Churchill estaba tan afectado que durante 48 horas dejó todas sus actividades y se refugió en Downing Street 10. No confiaba en sí mismo para  hablar en el Parlamento sin quedar dominado por la emoción.


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viernes, 6 de noviembre de 2015

III

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza
2015

Parte III:

(Recordemos algunos documentos importantes)
  1. 1907 el Informe de Henry Campbell-Bannerman.
Sir Henry Campbell-Bannerman, conocido coloquialmente como "CB" fue un político británico del Partido Liberal  que sirvió como primer ministro del Reino Unido desde 1905 a 1908 También se desempeñó como Secretario de Estado de Guerra en dos ocasiones, en los gabinetes de Gladstone y Rosebery. CB fue el primer Primer Lord del Tesoro que fue llamado oficialmente "Primer Ministro”.

En 1907 Campbell-Bannerman formó un comité con algunos eruditos prestigiosos de Gran Bretaña, Francia, Bélgica, Holanda, Portugal, España e Italia. Eran expertos especializados en la historia, la geografía, la economía, el petróleo, la agricultura y el colonialismo, reunidos para estudiar las posibles maneras de asegurar la prolongación de los intereses colonialistas europeos fuera de su territorio. Comenzó sus instrucciones diciendo a los miembros del comité 
“Señores los imperios crecen en el poder y en cierta medida amplían su territorio y luego comienzan gradualmente a desintegrarse hacia el colapso”. 
Les pidió que encontraran una manera de retrasar la suerte del colonialismo europeo que había alcanzado su punto máximo en ese momento, cuando el sol nunca se ponía sobre el Imperio Británico.

La Comisión de expertos concluyó que lo más conveniente para lograr el objetivo propuesto por el primer ministro británico era focalizarse en el área del Oriente Medio y llevar a cabo las siguientes acciones:
  1. Promover la división y separación del mundo árabe.
  2. Establecer entidades políticas artificiales que deberán estar bajo la autoridad del Reino Unido y de otros países imperiales aliados. 
  3. Luchar contra todo tipo de tendencias a la unidad -sea intelectual, religiosa o histórica— tomando medidas prácticas para dividir o enfrentar entre sí a los habitantes de la región. 
Para lograr estos objetivos, se propuso la creación de un "Estado amortiguador o perturbador" en Palestina, poblado con una fuerte presencia extranjera, que deberá ser hostil hacia sus vecinos, y amigo de los países europeos y sus intereses. Un funcionario del Ministerio de Colonias, Sir Side Potam, expresó que “no había mejor elección que los judíos para llevar a cabo la tarea colonialista”. Se refería a lo mencionado en el punto d.


  2. 1915  el Memorándum “Futuro de Palestina” de H. Samuel.

Este es el nombre de un Memorándum que a comienzos de 1915 el político británico Herbert Samuel, judío sionista y futuro primer Alto Comisionado británico en Palestina presentó a su gobierno con la finalidad de instarle a anexionar Palestina al Imperio y con ello ir creando las condiciones acordes a la ley pública internacional que favoreciesen el establecimiento de un estado judío en aquella tierra del Próximo Oriente.

La instalación de un enclave  judío en Palestina como una barrera o estado tapón o ('buffer')  había sido un deseo largamente acariciado por los estrategas imperiales británicos y fue incluso un medio muy utilizado para promover la causa sionista por parte de los líderes de ese movimiento. A principios del siglo XX, los sionistas, conscientes de la rivalidad imperial británica y francesa en el Oriente árabe,  sabían cómo convencer a Londres del valor de un Estado-barrera judío en Palestina, bajo control Británico para la protección del Canal de Suez y de las comunicaciones imperiales a la India 


   3. 1916  el "Acuerdo Sykes Picot" . 

Junto con el apoyo a la emigración judía y la colonización en Palestina, el Reino Unido y Francia firmaron el "Acuerdo Sykes Picot" en 1916. El acuerdo dividía a la Media Luna Fértil en cuatro estados, Palestina, Transjordania e Irak para Inglaterra, y Siria + Líbano para Francia. Los franceses tenían aspiraciones sobre Palestina, especialmente por los lugares Santos del cristianismo y la tradición gala de los Cruzados normandos, pero los británicos dijeron que la solicitud “carecía de sentido” ya que una parte de Palestina se destinaría para el establecimiento de una patria judía, Jerusalén tendría status internacional y Transjordania (que antes era parte de Palestina) sería un protectorado británico

   
   4. 1917  La Declaración Balfour  

Desde 1914  la Organización Sionista Mundial tenía muy avanzadas sus gestiones para embarcar al imperio británico en la fragmentación y hasta desaparición del imperio otomano con ayuda sionista. Haim Weizmann, quién en poco tiempo llegaría a ser presidente de la Organización Sionista Mundial, hizo una importante declaración pública: “Podernos decir razonablemente que si Palestina cae en la esfera de influencia británica y la Gran Bretaña alienta el establecimiento de los judíos allí, como dependencia británica, en veinte o treinta años podríamos tener allí a un millón de judíos, o quizá más; desarrollarían el país, le restituirían la civilización y formarían una guardia muy efectiva del Canal de Suez”. 

El gobierno británico hizo pública la Declaración Balfour el 2 de noviembre de 1917. 

La Declaración decía entre otras cosas que  “El Gobierno de Su Majestad ve favorablemente el establecimiento en Palestina de un hogar nacional para el pueblo Judío … “

Pocas semanas después los Estados Unidos pasaron de una mera declaración oficial de guerra a una intervención masiva de sus efectivos militares en Europa. La guerra de Estados Unidos era contra Alemania y el Imperio Austro-Húngaro, aunque no contra Turquía.

El historiador británico Arnold Toynbee calificó a Balfour de “hombre malvado”. Toynbee creía que Balfour y Lloyd George conocían las catastróficas implicaciones que tenían para los palestinos originarios esa Declaración. 
Balfour y el  Primer Ministro LLoyd George como su antecesor el inefable Henrry J. Temple, vizconde de Palmerston, el gran terrateniente de Irlanda y con cincuenta años de funcionario en distintos gobiernos ingleses. En el año1840 Parlmeston en el párrafo final de una carta dirigida al Sultán turco escribió: “Me gustaría sugerir fervientemente a Su Excelencia que el gobierno turco invite a los judíos europeos a volver a Palestina “. 

Todos ellos eran miembros fanáticos de las Iglesias protestantes que compartían la creencia cristiano-sionista sobre la necesidad de “restituir” Palestina a los judíos del Viejo Testamento antes de la Segunda Venida de Jesús. La Declaración Balfour conocida también como “Wa’ad Balfour” o la “Promesa Balfour” en árabe, se convirtió en un elemento fundamental de la memoria colectiva, los mitos y la propaganda sionistas y para el pueblo Palestino en un símbolo del engaño y la traición. 

En 1917 Weizmann, amigo íntimo del general Jan Smuts, un defensor de la separación racial, Primer Ministro de Sudáfrica se asoció a la redacción de los borradores de la Declaración, y argumentó: “Una Palestina judía sería una salvaguarda para Inglaterra, en particular con respecto al Canal de Suez”. 
Se reunían con Balfour un pequeño grupo de sionistas, dirigentes de la Organización Sionista Mundial que se atribuían la representación del pueblo judío, ellos eran Haim Weizmann, Naum Sokolov, Jan Smuts y Lionel Walter Rothschild. Este grupo fue el redactor de la Declaración que firmo Balfour y la hicieron aprobar por el Ministerio de Guerra y por el Primer Ministro Lloyd George. 

Weizmann confesó que "La Declaración Balfour de 1917, fue elaborada en el aire, luego de años de exigente trabajo; todos los días y todas las horas de esos últimos diez años, cuando abría los periódicos, pensaba: ¿De dónde vendrá el próximo golpe? Yo temblaba por temor a que el gobierno británico me llamara y preguntara: Dinos, ¿qué es esa Organización Sionista? ¿Dónde están ellos, quienes son tus sionistas? ¿Esas personas piensan en términos diferentes de los nuestros?  Ellos (los británicos) lo sabían, los judíos estaban en contra nuestra".

El único miembro judío del gabinete, que sí representaba al "pueblo judío", era el ministro de Municiones, Lord Edwin S. Montagu, quién se opuso tenazmente a esa declaración, y en su Memorándum, dirigido al Gabinete de Guerra británico, el 23 de agosto de 1917, directamente responsabiliza al banquero Lionel Walter Rothschild de ser el autor de la propuesta. Ese Memorándum fue entregado por Montagu poco antes de partir hacia la India, cuando fue designado secretario de Estado para la India, cargo que mantuvo hasta 1922.

La Declaración Balfour fue originalmente un mero deseo (wishfull thinking) de Su Majestad británica para que se constituyera “un hogar nacional judío” en la Palestina histórica. Pero nada más que un deseo, aunque lo expresara el imperio más importante en ese momento. Después la Declaración  fue aprobada por el presidente Wilson, junto con los gobiernos de Francia, Italia y el Vaticano, por lo que pasó a ser una promesa compartida con algunos actores del campo internacional; sin embargo, sigue siendo considerada “la más decisiva fuente de legitimidad” como lo señala correctamente Shlomo Sand cuando dice: “… después de la Biblia, la Declaración Balfour está considerada como la más decisiva fuente de legitimidad moral y política del derecho de los judíos a la ‘Tierra de Israel’.” 


   5. 1919  el Pacto de la Sociedad de las Naciones.

Este tratado internacional en varios artículos contradictorios  sustentó el otorgamiento al Reino Unido de un Mandato sobre PalestinaEn su preámbulo hace un reconocimiento a la Declaración Balfour, documento unilateral mediante el cual el gobierno británico se otorgaba en el año1917 el poder de asumir compromisos para con los judíos sobre un territorio que aún no le pertenecía.

En el art. 20 del Pacto se dice: “El presente Pacto abroga todas las obligaciones o entes internas incompatibles con estos términos”, pero este artículo no se aplicó a la Declaración Balfour cuando la Declaración estaba en evidente contradicción con otros articulados del mismo Pacto sobre el deber de velar por la preservación de los derechos civiles de las diferentes comunidades.

El Pacto afirma: Ciertas comunidades que antes pertenecían al Imperio Otomano, han alcanzado tal grado de desarrollo que su existencia como naciones independientes puede ser reconocida provisoriamente a condición de que los consejos y la ayuda de un mandatario guíen su administración hasta el momento en que ellas sean capaces de manejarse solas. Los deseos de esas comunidades deben ser tomados en especial consideración para la elección del mandatario”.

¿Por qué se otorgó el Mandato al Reino Unido si los representantes palestinos se opusieron?


   6.  1920  Actas de la Conferencia de San Remo.

Los círculos sionistas presionaron al Presidente de Estados Unidos Woodrow Wilson con la finalidad de que su país entrara en la Gran Guerra, consiguiendo que el gobierno de Estados Unidos presionase a su vez para que la Conferencia de San Remo de 1920 aceptara el principio de que el Estado Judío habría de fundarse oficialmente 25 años después del otorgamiento de un Mandato sobre Palestina al Reino Unido, previsto para 1922.

La fijación del año 1947 por la que los sionistas decidieron apostar para la fundación de su estado fue el homenaje que estos le rindieron a Theodor Herzl, al que de tal manera encumbrarían al altar de los profetas visionarios de Israel.


   7. 1922  el Mandato Británico sobre Palestina.

El Consejo de la Sociedad de Naciones otorgó al Reino Unido el Mandato sobre Palestina en 1922, el Consejo estaba conformado por las mismas potencias coloniales presentes en la Conferencia de San Remo celebradas dos años antes en calidad de miembros permanentes, y otros cuatros países en calidad de miembros no permanentes, resultando que dicho Consejo de la Sociedad de Naciones no hizo sino revestir de legalidad jurídica internacional los acuerdos tomados entonces por estas potencias a nivel individual en la ciudad italiana de San Remo en 1920.


(Continúa)


sábado, 24 de octubre de 2015

II

Cuando los senderos se bifurcan para reencontrarse.
Alec Mendoza
2015

Parte II:

Los registros de inmigración indicaban que dos jóvenes  integrantes de la brigada judía de Palestina habían llegado a El Cairo, posiblemente el 1 de noviembre de 1944, vistiendo uniformes del ejército británico y los documentos que presentaron los identificaban como Moishe Cohen Itzhak de 20 años y Chaim Saltzmann de 23, quienes invocaron como motivo del viaje descansar durante una semana. Días después un policía testificó haber visto varias veces a estos jóvenes  pedaleando lenta y plácidamente sus bicicletas frente a las Villas de la calle Hassan Sabry cerca del exclusivo Gezira Sporting Club. 

Para los británicos el control de Egipto era una prioridad vital dado que el canal de Suez les permitía el acceso a la ruta más cercana para la India y, al mismo tiempo, la ocupación de Sudán les facilitaba el ingreso al interior del continente. Cecil Rhodes, en el sur de África, trabajaba en unir las posesiones coloniales británicas por medio de un ferrocarril que comunicara Ciudad del Cabo por el sur y Alejandría por el norte, ese era otro proyecto ambicioso en África del imperialismo de la corte victoriana.

Recién en 1900 casi medio siglo después de iniciada la fiebre petrolera en la costa este de Estados Unidos, la inmensa zona sureña del Oriente Próximo entró en escena.  Los inicios fueron cautelosos, el primer movimiento lo hizo el Sha de Persia (Irán), quien le ofreció concesiones petroleras a Gran Bretaña, esto provocó la ira de Rusia -que buscaba expandirse por Asia central y reclamaba el control del Golfo Pérsico-. El Reino Unido decidió esperar.

El Sha mantenía relaciones con un inversionista inglés interesado en el negocio petrolero: William Knox D'Arcy, cuya fortuna provenía de las minas de oro de Australia y en cuyas fiestas solían actuar artistas de la talla de Enrico Caruso. W.K. D'Arcy estuvo tres años trabajando sin grandes resultados, el Foreign Office comprendió que si Gran Bretaña no intervenía oficialmente en el petróleo de Irán, sería Francia, Alemania o Rusia, las que lo harían por lo que decidieron apoyar a D'Arcy participando con dinero del Reino Unido y con sus propios ingenieros en los aspectos técnicos. Si bien William Knox D'Arcy no llegó a ser el Rockefeller inglés, su alianza con el Sha y el Reino Unido llegó a constituir la poderosa Anglo-Persian Oil Company, compañía predecesora de la actual British Petroleum.

En 1914, Egipto y Chipre pasaron a ser Protectorados británicos y todo el valle del río Nilo fue declarado esfera de influencia de la Corona de S. M. británica; todavía faltaba conquistar Palestina, gran parte de Siria, los campos petrolíferos del corredor Kurdo y lo que luego serían Irak y Kuwait.

Los jóvenes ciclistas que recorrían el barrio Zamalek no estaban paseando, no eran soldados de la Brigada Judía en vacaciones y no se llamaban Moishe Cohen Itzhak y Chaim Saltzmann. Más tarde se supo que sus nombres verdaderos eran Eliahu Hakim y Eliahu Ben Tsuri. Estaban reconociendo el terreno de acción, estimando tiempos, verificando los caminos de escape y decidiendo la mejor forma de cometer el asesinato.              
Pertenecían a la Banda de Stern, también conocida como el grupo “Leji”; Un acrónimo hebreo para Lohamei Jerut Yisrael  (Combatientes por la Libertad de Israel).

Walter Edward Guinness, Lord Moyne, había ocupado los cargos de Ministro de Agricultura, Ministro de Ultramar, líder de la Cámara de los Lores y desde 1943 era Ministro de Estado y representante del Gobierno británico en El Cairo, además Lord Moyne era íntimo amigo de Winston Churchill. Lord Moyne respondió con indiferencia cuando el Mayor Samson llegó a su casa para informarle que las medidas de seguridad serían más estrictas debido a que el MI5 sospechaba que podía ser un blanco posible de terroristas.

Moyne le dijo: "Desde hace muchos años, nuestros soldados están luchando y muriendo en el campo de batalla todos los días, incluso nuestro Rey es susceptible de ser asesinado por una bomba. Exijo participar en el riesgo común“. Cuando Samson señaló que su deber como jefe de seguridad sobre el campo era cuidar de que el Ministro estuviera protegido adecuadamente, Lord Moyne le advirtió: "Yo no quiero guardias cerca mío cuando juego al golf o cuando invito a mis amigos a la Villa”. Samson se mantuvo firme,  insistió en duplicar la guardia del Ministro, tener un coche de la policía militar siguiendo a su automóvil  y otras medidas de seguridad en los alrededores de la Villa. Todo esto fue aceptado a disgusto por el Ministro, pero la única condición que puso no era racional, él podía despedir a sus guardias cuando se dedicaba a sus actividades sociales privadas.

Decía Max Nordau en 1897: “La emancipación de los judíos se convirtió en uno de esos elementos del mobiliario imprescindibles en todo Estado civilizado, como el piano que no puede faltar en el salón, aunque nadie en la familia sepa tocarlo. Así, los judíos obtuvieron su emancipación en el occidente de Europa no por un impulso íntimo, sino por imitación de una moda política… sólo hay un país al que esto no es aplicable: Inglaterra. El pueblo inglés no permite que su progreso venga impuesto desde el exterior, la evolución se produce desde dentro. En Inglaterra, la emancipación de los judíos es una realidad”

Simon Miksa Südfeld, nacido en 1849 en Budapest, cambió su nombre por el de Max Nordau cuando se estableció en Berlín en 1873. Fue periodista del Die Neue Freie Press, diario que lo envió a París, donde pasará la mayor parte de su vida. Mientras que la historia ha consagrado el nombre de Theodor Herzl como fundador del sionismo moderno, realmente fue Nordau quien impulsó la organización del I° Congreso Sionista inaugurado el 29 de agosto de 1897 en Basilea con la presencia de 162 delegados; el Congreso funcionó en el casino de la ciudad suiza, tras la negativa de la comunidad judía de Munich a albergarlo. 

Al igual que Herzl, Nordau estaba totalmente adaptado a la cultura europea y era completamente ateo. Herzl y Nordau recuperaron su hebraísmo durante el Caso Dreyfus, el cual les llevó a afirmar que la asimilación de los judíos era una trampa y que la única solución posible era la creación de un Estado-Nación, basado en las nociones heredadas del romanticismo alemán y en el empuje de los nacionalismos europeos del siglo XIX. Las palabras usadas por Nordau en su discurso son explícitas: habla de los judíos como "Rasse" (raza) y como "Stamm" (tribu). A partir de esta definición las relaciones del sionismo con el imperio británico comenzaron a solidificarse.


El 6 de noviembre de 1944 a la 1,00 o 1,15 pm, como todos los días, llegó a su casa para almorzar, lo acompañaban el chofer Lance Corporal Fuller y en el asiento trasero del automóvil su secretaria, la señorita J. Osmond y el capitán Hughes Onslow su Oficial de enlace. No tenía la tradicional custodia del coche de la Policía Militar porque el Ministro personalmente les dijo “Muchachos hoy no los voy a necesitar, no regresaré a mis oficinas, están en libertad”. Lord Moyne trabajaba en Pilares Grises un hermoso edificio de tres pisos en el número 10 de la calle Tolombat en Garden City, allí coordinaba los esfuerzos de guerra británicos y los aliados en el Medio Oriente y diseñaba proyectos secretos para la zona encargados por Churchil.

(Continúa)